La EFSA (Agencia de Seguridad Alimentaria de la Unión Europea) ha realizado una revisión sobre la documentación científica relacionada con la seguridad de los alimentos clonados y reafirma que son seguros, que no afectan a la salud de los consumidores. Los alimentos obtenidos a partir de animales clonados o su descendencia son similares a los alimentos que se obtienen de animales tradicionales, es decir, la conclusión es prácticamente la misma que ofrece la FDA (Food and Drug Administración), Administración de Alimentos y Fármacos de Estados Unidos, esta agencia ha argumentado desde hace tiempo que los alimentos tradicionales y los alimentos clonados muestran características y propiedades nutricionales muy similares y son aptos para el consumo.
Sin embargo, la EFSA, a diferencia de la FDA, sí apunta que en lo que respecta a la salud y bienestar de los animales clonados, no se ha avanzado mucho y existen problemas que se deben solucionar. Recordemos por ejemplo que los animales clonados tienen una tasa de enfermedades y mortalidad mucho más elevada que los animales tradicionales, algo que nos hace pensar que sí existen diferencias. Como ya sabemos, algunos investigadores han apuntado que este problema se origina por las técnicas que se emplean en la clonación, éstas no ofrecen las máximas garantías y por tanto se debe trabajar en el perfeccionamiento de los procedimientos, algo que en teoría reduciría el problema de las enfermedades y la mayor mortalidad.
Al respecto, queremos recordar que en estudios anteriores en los que se ha analizado la percepción de los consumidores sobre los alimentos procedentes de los animales clonados y su descendencia, los estadounidenses se preocupan mucho más por la seguridad alimentaria, siendo este el principal argumento para rechazar este tipo de alimentos. Es lógico pensar que no son alimentos tan seguros, a la vista de los datos sobre enfermedades y mortalidad. En cambio los europeos parecen preocuparse más por las cuestiones éticas y morales, algo que personalmente no terminamos de creer, sobre todo porque el estudio se realizó con una muestra de estudiantes en vez de realizar una encuesta a un nivel más general. Lo más sorprendente es que, a pesar de que los estadounidenses se preocupen más por la seguridad que ofrecen estos alimentos, también son los que los aceptan de mejor grado, de todo ello hablábamos en el post Percepción de los consumidores sobre los alimentos clonados.
El nuevo informe de la EFSA se ha centrado principalmente en la leche, la carne de vacuno y la carne de cerdo, en lo que respecta a otras especies animales, existen pocos datos. Esta es la tercera evaluación que se realiza y se basa en algunos nuevos informes y en la revisión de la documentación aportada en evaluaciones anteriores (2009 y 2010) en las que se revisaron los estudios existentes hasta el momento. La presente evaluación se ha realizado tras la petición que realizó la Comisión Europea a finales del 2011, parece evidente que la UE pretende conseguir la aceptación de este tipo de alimentos. De todos modos, hay que recordar que la EFSA en el año 2008 cambió su postura inicial de plena aceptación, a un rechazo de las carnes y alimentos derivados de animales clonados, el argumento proporcionado era que no existían suficientes estudios y datos que avalasen la seguridad.
Del 2008 al 2009 se produce un nuevo cambio, pero los estudios siguen siendo prácticamente los mismos, paralelamente se realizó en el seno de la UE un debate sobre la clonación. La oposición era entonces notoria, consumidores, grupos parlamentarios, organizaciones ecologistas, etc., pero Bruselas mantenía su empeño en realizar la revisión para plantear la posibilidad de adoptar o no, una prohibición sobre la clonación animal para la obtención de alimentos. En el 2010 la EFSA ratifica la seguridad de estos alimentos en lo que respecta al ganado vacuno o los cerdos y parece aplicar el principio de equivalencia sustancial. También ratificaba entonces la alta tasa de enfermedades y mortalidad de los animales, problema que parecía quedar relegado a un segundo término, como decíamos, la intención era lograr la aprobación de la producción y comercialización de estos alimentos.
Total, ahora se vuelve a presentar otra revisión y determina que no sólo no ha encontrado ninguna información que llevaría a la agencia a cambiar su postura, sino que además ratifica las conclusiones emitidas en las anteriores revisiones. Recapitulando, La EFSA dice no haber encontrado indicios que muestren diferencias entre alimentos tradicionales y clonados, el único problema evidente son los procedimientos y técnicas empleadas en la clonación, algo que se asocia a la alta tasa de enfermedad y mortalidad de los animales. La descendencia de los animales clonados se desarrolla normalmente y no sufren estas complicaciones. No existen datos que muestren que la clonación animal pueda ser una amenaza para la diversidad genética, el medio ambiente o la biodiversidad. Parece que se recomienda aprobar este tipo de alimentos y a la vez trabajar en las técnicas que reduzcan los problemas que tienen los animales clonados, podéis leer el informe completo a través de este enlace (Pdf).
El informe que hemos conocido a través de la página web de la EFSA, dará paso a nuevos debates y posiblemente la Comisión Europea intentará de nuevo que los alimentos clonados sean aprobados bajo la excusa de ser más competitivos, no descolgarse de los avances tecnológicos alimentarios y de los posibles beneficios económicos que traigan consigo, no tardaremos en conocer nuevas noticias al respecto.
Foto | Bruijn Wouter de Bruijn