Guisantes con wasabi

Desde que hace unos años conocimos los guisantes con wasabi en una feria alimentaria, por un lado nos quedamos prendados de sus características gustativas, pero por otro nos provocaba cierta reticencia su consumo, no nos gusta adquirir productos importados, de este tipo, cuyo etiquetado no contiene el sello del registro sanitario, y ni siquiera se pueden conocer los ingredientes o el nombre del producto porque no hay traducción.

Con lo que nos gustan las elaboraciones picantes, y particularmente el wasabi, siendo incluso en ocasiones el deseo de saborearlo lo que nos anima a preparar sashimi, sushi, etc., hace unos días nos volvían a ofrecer estos guisantes crujientes con wasabi, y la anterior experiencia nos hizo aceptarlos, pero continuábamos sin mucha confianza.

Debemos reconocer que nos equivocamos, de hecho, nos trajimos unos cuantos paquetes de los guisantes fritos con wasabi que veis en la fotografía. Es un producto de Tailandia que importa Tokyo-ya, y se pueden encontrar en su tienda online y en varios comercios especializados, de productos gourmet como el de El Corte Inglés, etc.

Ya podemos conocer su composición, además de los guisantes, para ofrecer una textura bien crujiente y el sabor del wasabi, muy potente por cierto, añaden harina de trigo, wasabi en polvo, arroz glutinoso, salsa de soja, azúcar, sal, aceite vegetal y colorantes E102, E110.

Esto si miramos el listado de ingredientes en español, comprobando el etiquetado en inglés, vemos que los colorantes son el E102 y el E133, y además lleva conservantes E210 y E211. ¿Tanto cuesta poner un etiquetado correcto?, con esto lo único que consiguen es crear desconfianza en el consumidor.

En fin, si os gusta el particular picante del wasabi (no hay necesidad de que os gusten los guisantes), disfrutaréis de los guisantes fritos con wasabi, pero hacedlo con moderación, es un snack, o un ingrediente para añadir a algún plato en particular, para disfrutar ocasionalmente. Sobre su precio, variará según el comercio en el que lo compréis, puede rondar entre los 2’50 y los 3 euros.