Después de compartir parte de nuestra experiencia en Marqués de Riscal, la demostración de la técnica del degüello en la Bodega 1860 de Marqués de Riscal y la cata de vinos D.O. Rueda en el Aula Marqués de Riscal, os queremos enseñar, a través de la galería de imágenes, algunas instalaciones y momentos capturados en La Ciudad del Vino, conocida, y muy reconocida, a nivel internacional por su historia, su infraestructura y por supuesto, por sus vinos.
De hecho, de la producción de vinos de Marqués de Riscal, sólo un 40% es para consumo nacional, el 60% restante está destinado a la exportación, su vino llega a 94 países. Cabe destacar también que de las 73 Denominaciones de Origen de vinos españoles, si hablamos de blancos, lideran el mercado los vinos D.O. Rueda, con un 17%, seguidos de La Mancha con un 13’2%, Catalunya con un 9’4% y Rioja con un 9’1%.
Marqués de Riscal demuestra lo que escuchábamos en el vídeo de la cata sobre la intuición del potencial que había en Rueda para la producción de vinos blancos, de hecho, se instalaron allí ocho años antes de que fuera Denominación de Origen. Por otro lado, el orden de ventas de los vinos tintos con Denominación de Origen están liderados, como bien sabemos, con un 37’7% por La Rioja, le sigue Ribera del Duero con un 8’6%, después Valdepeñas con un 6’7% y La Mancha con un 6’2%.
Otro dato interesante es conocer las tres subzonas vinícolas de La Rioja, son la Rioja Alavesa, la Rioja Alta y la Rioja Baja. Cada subzona aporta sus características al vino, dependiendo del suelo, del clima, de las variedades de uva, y por supuesto, del conocimiento a la hora de hacer vino, son los cuatro pilares que marcan la calidad de un vino, el Terroir.
En respuesta a qué vinos de La Rioja son más valorados, la respuesta es la Rioja Alavesa, precisamente donde se encuentra la Ciudad del Vino, en Elciego (Álava). Sobre el nivel de exportación de Marqués de Riscal hay que decir que juegan con mucha ventaja con respecto a otras bodegas, pues empezaron con ello en 1874.
Volviendo al paseo ilustrado que a continuación vais a poder ver, siempre que hemos visto la obra del arquitecto canadiense Frank O. Gehry, el edificio en el que se encuentra el hotel de Marqués de Riscal, nos ha parecido que parte de su belleza y armonía con el entorno se debía a la elección del día para inmortalizar la imagen y además de manos de expertos fotógrafos, pero no es del todo así, mirad la imagen que encabeza este post, ampliadla pulsando sobre ella, admiradla…
Un día cualquiera con una cámara en nuestras manos también expresa lo que el arquitecto y Marqués de Riscal han pretendido: tradición, vanguardia, atracción a la vista, manifestación del tacto, despertar del olfato, el placer… como el que tiene que provocar la degustación de un vino.
