Aunque se anuncian como máquinas que detectan el gusto de los consumidores, en realidad son máquinas expendedoras intuitivas, ya que trabajan utilizando un sistema de reconocimiento facial que trata las imágenes captadas por una cámara de vídeo HD colocada sobre la máquina vending. Un pequeño ordenador se encarga de analizar las características faciales de los compradores cuando miran los productos, suponemos que cuenta con una base de datos para comparar las expresiones, el movimiento de los ojos, quizá la constitución de la persona…. datos que una vez procesados intuyen qué quieren adquirir los usuarios.
Hay que decir que este proceso encierra gran dificultad, sobre todo porque el proceso se ha de realizar en tiempo real, las caras varían y son desconocidas, se comparan con los parámetros contenidos en la base de datos y resuelve con una pequeña selección de productos que muestra a través de una espectacular puesta en escena. Como se muestra en el vídeo, las máquinas vending intuitivas son similares a otras máquinas expendedoras pero con la diferencia de que el cristal es una pantalla frontal de 65 pulgadas que muestra la selección de productos y se acompaña con graciosas imágenes animadas por todo tipo de animales.
Sin duda, es un concepto interesante, pero en nuestra opinión quizá demasiado caro y poco efectivo, de hecho, en las máquinas expendedoras tradicionales basta con mirar qué queremos, introducir las monedas y realizar la selección. Este mecanismo se transforma con una puesta en escena original y quizá a corto plazo rentable, ya que muchos querrán ver cómo funciona, pero a largo plazo posiblemente los resultados serían similares a los de las expendedoras tradicionales. Una revolución sería acercarse a la máquina y recoger el producto sin tener que hacer nada en absoluto, pago mediante reconocimiento facial, fiabilidad 100% en la elección mediante una confirmación visual, como mirar un par de segundos un producto y hacer un gesto con la cabeza (porque leernos la mente será todavía más complicado).
Hay que reconocer que la innovación en las máquinas vending es una constante y parece que lo que funciona es la puesta en escena, podemos recordar ejemplos como las Vending de patatas Lay’s que funciona con patatas, aunque en realidad es una simulación que reproduce fielmente una pequeña fábrica de patatas fritas. BeMoved, la máquina de café del futuro es otro ejemplo, esta vending también trabaja con una cámara y se basa en la idea de que los consumidores quieren interactuar con la máquina. Finalmente destacamos otro ejemplo, aunque en esta ocasión el atractivo es el proceso de elaboración, preparación y servicio, nos referimos a Let’s Pizza, la máquina expendedora de pizzas recién horneadas.
Sin duda se trata de un concepto interesante, pero debe evolucionar.