En la tercera planta del Centro Cultural Miguel Delibes de Valladolid se encuentra el Restaurante Zarabanda by Ramiro’s, vamos, de Jesús Ramiro, reconocido chef vallisoletano que junto a su hijo, Jesús Ramiro Júnior, son referentes en el mundo de la restauración pucelana. Tiempo atrás ya visitamos su restaurante Ramiro’s, donde disfrutamos de un excelso menú degustación que podéis ver en el post Restaurante Ramiro’s, y el pasado lunes pudimos volver a disfrutar de su cocina, pero en esta ocasión en el mencionado Restaurante Zarabanda.
La comida fue el pasado lunes y como podéis ver en las imágenes, nos presentaron una gran mesa para todos los asistentes. Es un comedor amplio, abierto, cómodo, pensado tanto para grandes eventos como este, como para ofrecer el servicio de restaurante habitual. El menú que degustamos en el Restaurante Zarabanda es el que os mostramos a continuación, fue un menú especial adecuado a la mesa que conformábamos, pero podéis ver la carta de invierno que actualmente están sirviendo a través de la página web del restaurante.
Empezamos degustando el vino (que etiquetan para el Zarabanda, pero como sabéis, también están embarcados en la elaboración de vinos, disponéis de más información a través de la web Ramiro Wine Cellar) y enseguida llegó la Sopa de cebolla tostada con praliné y crema de hongos y foie, ideal para entrar en calor recién llegados a una ciudad en unos días en los que hacía más frío, y además con gusto, un entrante suave y sabroso.
Gracias a que el menú era corto, no tuvimos que dejar el pan de Valladolid que siempre luce en las mejores mesas de los restaurantes vallisoletanos, como ya sabéis, un pan que nos encanta, pero vamos a por el siguiente plato. Este fue el Bacalao con crema de patata y estofado de morro. Como veis, una vuelta a la cocina tradicional de la que tanto se disfruta en estos tiempos, con juegos de sabores de siempre, puntos de cocción muy buscados para el éxito y pequeños toques de distinción que conquisten a los comensales.
La carne vino presentada en un taco de Rabo de vaca sobre verduritas, un guiso tradicional con una presentación cuidada que se aderezaba con una rica salsa de berenjena y regaliz, buen acompañamiento para unas verduras al dente y una carne muy tierna.
El postre fue un Brownie con piña estofada, galleta y crema de coco, sabores que se combinan muy bien, que endulzan y refrescan el paladar, aunque el brownie no nos pareció tal, era más bien un bizcocho con nueces poco jugoso, pero para contrastarlo se encontraba la crema, el helado y la fruta.
Buen café y buena compañía, interesante primera experiencia que nos llevará a visitar el Restaurante Zarabanda próximamente para descubrir un poco más de su carta y del arraigo al producto de la tierra.