Recién llegados de Valladolid, perfumados todavía por los aromas desprendidos de uvas tintas y verdejo, mimadas por una de las bodegas más prodigiosas de la Denominación de Origen Ribera del Duero, repasamos la experiencia, las fotografías y todo lo que hemos aprendido en Bodegas Protos, para ahora compartirlo con vosotros.
No podemos dejar de citar estas palabras con las que nos introducen en las Bodegas Protos, “Es en Peñafiel, localidad vallisoletana vertebrada por el río Duero, donde nace este sorbo de la tierra.” La tierra no emana el vino, pero regala cualidades al fruto que unidas a la mano del hombre y a las nuevas tecnologías, ofrecen ese sorbo capaz de despertar la pasión por el vino.
Bodegas Protos se encuentra en la falda del Castillo de Peñafiel, un castillo roquero que como sabéis, alberga el Museo del Vino de Valladolid. Bodegas Protos (término griego que significa Primero) nació en 1927 fruto de la unión de los viticultores de la comarca, crearon una bodega cooperativa que a día de hoy es referente mundial de los vinos de la Ribera del Duero. Recientemente la bodega fue ampliada por la necesidad de cubrir la demanda de sus vinos, la parte antigua de la misma cuenta con dos kilómetros de pasillos en el interior de la montaña, donde reposan las barricas que gozan de una temperatura constante y una humedad adecuada para la evolución de los vinos.
Esta bodega comunica bajo tierra con la nueva construcción que se encuentra al otro lado de la carretera, y que como muchos de vosotros ya conoceréis, fue diseñada por el arquitecto británico Richard Rogers, premiado en 2007 por la fundación estadounidense Hyatt con el Premio Pritzker por su trabajo en la T4 de Barajas. Parte de este diseño se ve reflejado en la nueva edificación de Bodegas Protos, en el espacio, en los materiales, en sus líneas… predomina el cristal, el hormigón y la madera, y se ha huido de los adornos y artificios a fin de otorgar el lujo al espacio funcional, en un total de 20.000 m2 construidos en dos plantas.
Bodegas Protos nació con tres marcas de vinos, Protos, Peñafiel y Ribera Duero, la primera permanece, la segunda desapareció, y la tercera fue cedida para la Denominación de Origen que hoy acoge los viñedos que se encuentran dentro una franja de la cuenca del río Duero, en Castilla y León. Es por ello que Protos es la única bodega que puede desmarcarse en el etiquetado con la leyenda ‘Ribera Duero’, como podemos ver en las actuales etiquetas del vino Rosado y del Roble.
Nuestra visita a la bodega estuvo dirigida por el enólogo José Carlos Guzmán Serrano, director técnico de las Bodegas Protos desde 1999, y a quien le avala un extenso currículum profesional en el que se incluye el estudio de variedades de uva, introduciendo la variedad Sauvignon cuando se encontraba en Marqués de Riscal, experimentando en los viñedos con la recuperación y puesta al día de zonas de gran tradición vinícola, asesorando bodegas, etc.
Empezamos conociendo las primeras instalaciones de las Bodegas Protos mientras nos explicaba que en total se albergan 12.000 barricas bordelesas de 250 litros, es tonelería francesa de roble americano, y trabajan con distintas tonelerías para ir probando incluso las que elaboran pequeñas empresas y descubrir lo que cada una puede otorgar al vino.
Diversos túneles se encuentran bajo las rocas que sostienen el Castillo de Peñafiel, el último se hizo en el año 1994. En esta área se encuentran las barricas apiladas en cuatro alturas, cinco como mucho, el trabajo allí es todavía manual.
Pudimos contemplar los depósitos e isotermos para finos jóvenes, donde Carlos Guzman nos aleccionaba sobre los métodos de elaboración de los vinos blancos y rosados. Pasamos por distintas salas de barricas, pudiendo contemplar incluso las más nuevas, éstas siempre se instalan primero en la nueva bodega, y sobre ellas nos explicó que durante unos cuatro meses tienen que ir rellenando la merma de vino hasta que la barrica está totalmente impregnada.
Esta bodega tiene un total de 12.000 barricas, una producción de botellas cifrada en cuatro millones, y 3 millones más desde que está en marcha la nueva edificación. Su principal mercado es España, todos conocemos los vinos de Protos, pero no es pequeña su exportación, el 20% de los vinos de Bodegas Protos se exportan, estando hoy presentes en 80 países.
Bodegas Protos tiene una línea de ocho vinos que tras la visita a la bodega, pudimos catar, empezando con el Verdejo, continuamos con el Verdejo Fermentado en Barrica, continuamos con el Rosado para pasar después al Joven Roble. En la sala de catas pudimos disfrutar también del Crianza y del Reserva, mientras que el Gran Reserva y el Selección los tomamos con la comida, imaginad, además de unos entrantes castellanos exquisitos, un lechazo de Castilla y León impresionante.
Sobre los vinos os hablaremos detenidamente en breve, además de poder mostraros más imágenes en vídeo sobre Bodegas Protos.
4 comentarios
Seguro que no contaban con la publicidad de coincidir en nombre con una raza del videojuego Starcraft
Que bien lo pasamos. Yo volvería esta fin de semana de nuevo 🙂
Vamos, y nosotros!!! Que nos quedamos con las ganas de visitar los viñedos 😉
Un abrazo
Un maravilloso post, el cual, hace justicia la Trayectoria de esta gran Bodega de la Ribera del Duero