Al parecer, la FAO (Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación) ha convocado una reunión extraordinaria en su sede ante las fluctuaciones en los precios del mercado de los cereales, los expertos temen una nueva crisis alimentaria mundial causada por una serie de problemas, la reducción de las cosechas de cereales en Rusia, las inundaciones de Pakistán… problemas que han derivado en un incremento significativo del precio del trigo y otros cereales.
Es lo que tiene la globalización de los mercados, basta un incidente o un problema en un país para que todo el conjunto de países se vea arrastrado de forma involuntaria, o voluntaria. Decimos voluntaria porque son muchos los productores que han visto una buena oportunidad para incrementar el precio de sus cosechas ante el problema ruso. Recordemos que la producción de este país se ha visto diezmada a causa de las fuertes sequías y olas de calor sufridas, de todos modos el presidente ruso afirmaba que a pesar de la reducción de 30 millones de toneladas de cereales, la demanda interna estaba cubierta y además con excedente. Hablar de nueva crisis alimentaria mundial tampoco tiene mucho sentido y menos sabiendo que aún sufrimos la consecuencias de lo sucedido hace un par de años.
Sería interesante retomar la lectura del post La crisis alimentaria mundial se mantendrá durante siete años, Robert Zoellick, presidente del Banco Mundial, argumentaba algunas razones para realizar su predicción y entre ellas estaba presente la extrema sequía (lo que ha ocurrido en Rusia), a todo esto hay que añadir el resto de razones que hacen creer que la crisis nunca ha desaparecido, en todo caso, ahora se puede vivir un nuevo repunte. Basta con saber que otra vez se han iniciado conflictos en países como Mozambique y Egipto, de ello nos hablan en ABC. Con respecto a Egipto, recordemos que ya en el año 2008 se sufrió la denominada crisis del pan.
Los países en vías de desarrollo sufren la carencia de alimentos, los nuevos acontecimientos vuelven a incidir en los subsidios europeos y estadounidenses, subsidios que según indican algunas personas son los responsables de las carencias que sufren los países en vías de desarrollo, y en consecuencia los graves disturbios y revueltas que se producen. La agricultura está actualmente muy valorada, no ocurre como antaño que se realizaban esfuerzos en el desarrollo industrial o energético, ahora resulta más interesante invertir en agricultura y más sabiendo la importancia que ha adquirido la alimentación. Crecen los inversores en el mercado de commodities alimentarias y problemas como la sequía y reducción de cosecha en Rusia, contribuyen a rentabilizar las inversiones agrarias y a incrementar las especulaciones.
La verdad es que los precios se incrementan significativamente y los expertos se reúnen para afrontar esa nueva subida de precios, en el seno de la FAO se estudiará y tratará toda la información relacionada al respecto y se presentará un documento que informará sobre la situación de oferta y demanda actual. La reunión que ahora se realiza con urgencia, se suele realizar cada dos años, los grupos Intergubernamentales sobre los Cereales y el Arroz se reúnen para abordar estos temas, la última fue el año pasado y en teoría la siguiente debería haberse realizado el año que viene, pero la situación ha precipitado la reunión.
Esperamos que se logren dar soluciones y que no se organicen nuevas cumbres alimentarias mundiales, la primera bajo el lema Seguridad Alimentaria Mundial, los Retos del Cambio Climático, fue un completo fracaso, del mismo modo, la celebrada el año pasado bajo el lema Cumbre Mundial sobre la Seguridad Alimentaria también resultó un fiasco. Este tipo de cumbres sólo sirven para incrementar los gastos que tiene la FAO y por tanto se reducen los fondos que se destinan a las ayudas humanitarias alimentarias.
En definitiva, no nos sorprenderá que en breve se anuncie una gran cumbre mundial sobre la alimentación para tratar el problema de la escasez de alimentos y qué políticas se deban abordar al respecto. De todos modos esperaremos a conocer los resultados facilitados por la FAO ante la supuesta crisis alimentaria, hay mucho que hablar al respecto.
Foto | OliBac
2 comentarios
Poco que añadir, la verdad. Si acaso redundar en la desconfianza sobre la actuación de la FAO y algunas de sus estrategias, pero sobre todo un matiz: el problema de los subsidios agrícolas y los aranceles impuestos por occidente afecta sobre todo a la capacidad exportadora de los países terceros, no a su producción para consumo interno. Por desgracia, es una constante el ver muchos países que aumentan sus tasas de exportación de cereal al mismo ritmo que su número de personas en situación de pobreza extrema.
Sería interesante tener en cuenta la información de los post, Alquiler de superficies de cultivo, Comprar tierras cultivables en otros países para garantizar la alimentación y Compra de superficies de cultivo en países subdesarrollados, todos reflejan un problema que a la larga va a pasar factura, especialmente a los países en vías de desarrollo.
Saludos.