La salsa de ostras es un aderezo de la cocina china creado alrededor de 1888, año en que nació la empresa de alimentación Lee Kum Kee International Holdings Ltd, en principio para la comercialización de esta salsa, pero actualmente elabora muchas más. Su creador fue Lee Kam Sheung, y como sucede en muchas ocasiones fue fruto de un descuido culinario. Al parecer, se excedió en el tiempo del cocinado de unas ostras, pero quiso aprovecharlas añadiéndolas a una sopa y como podemos deducir, el descuido fue una suerte para la gastronomía.
A día de hoy son muchas las empresas que elaboran y comercializan la salsa de ostras, y cada cual tiene sus fórmulas para ofrecer una salsa oscura, densa y viscosa, de intenso aroma salino y potente sabor, el conocido como sabor umami. La auténtica salsa de ostras se elabora con un concentrado que se obtiene de las ostras, que se cuecen en agua a fuego lento y por un tiempo prolongado, el caldo se reduce, se concentra, va caramelizando y adoptando el característico color oscuro y densidad.
Si tienes una botella de salsa de ostras en tu despensa, seguramente verás que en los ingredientes indicados en la etiqueta aparecen muchos otros componentes y de salsa de ostras poca cosa, por ejemplo, en la nuestra consta que contiene un 9% de extracto acuoso de salsa de ostras, que elaboran con ostras en salmuera, y el resto es agua, azúcar, harina de trigo, sal, almidón de maíz, colorante, glutamato monosódico y otros potenciadores del sabor…
Nada que ver, pero, en fin, es lo que nos llega al mercado occidental. Si vas a un restaurante chino medio, seguramente estarán utilizando este mismo tipo de salsas en sus platos (no os queremos contar cuando preguntamos en estos establecimientos si tienen vinagre de arroz).
La cocina china, la tailandesa y la filipina son las que más utilizan la salsa de ostras, son muchas las posibilidades que ofrece, su intenso sabor acompaña muy bien a verduras, fideos, carnes y pescados, se puede añadir guisos o salteados, y también antes de servir una sopa o una crema.
La salsa de ostras (bueno, el sucedáneo) se puede encontrar en la sección de alimentación internacional de grandes hipermercados y en tiendas especializadas, a un precio en torno a los 4 euros. ¿Tienes algún plato que quieras compartir en el que encuentres imprescindible la salsa de ostras?
Foto | Fotoos Van Robin
2 comentarios
Buenas tardes. Me gustaría saber si la salsa de ostras se puede comer cruda directamente del bote.
Muchas gracias.
Hola Ana, sí, esta salsa se puede utilizar en recetas que no se tengan que cocinar.
Saludos