El turrón de marca blanca fue una apuesta fuerte por los consumidores el año pasado debido al ahorro que suponía en el extra de compras que se realizan en esas fechas, aún así, había buenos productos, turrones de marca blanca con sello de garantía IGP Jijona y Alicante. Pero este año, las ventas de turrón en general se van a ver muy afectadas, especialmente para los fabricantes de turrón de la única denominación protegida y reconocida por la UE.
Por un lado, hace un par de semanas se daban datos sobre la previsión de ventas de turrón para estas navidades, a causa de la crisis, muchas empresas han cerrado y esto se traduce en menos cestas de Navidad y en consecuencia, en menos ventas de turrón y dulces navideños. Según el presidente del Consejo Regulador de Jijona y Turrón de Alicante, José Enrique Garrigós, las cestas de Navidad comprendían el 20% del total de dulces de Navidad vendidos por este sector, y se calcula que las ventas se reducirán a la mitad. Además, augura una reducción general de ventas en nuestro país en torno a un 12-15% y la exportación caerá aproximadamente un 10%.
Por otro lado, con respecto al turrón de marca blanca, leemos en La Verdad una noticia que va a hacer notar aún más la crisis al Consejo Regulador Jijona y Turrón de Alicante, al parecer, el 70% de los hipermercados va a prescindir del sello de calidad IGP Jijona y Alicante en los turrones de marca blanca, simplemente comercializarán turrón duro o blando.
La batalla de los hipermercados por ofrecer precios más baratos a los consumidores, hace prescindir de los productos que encarecen la cesta de la compra, en este caso, el uso de materia prima y elaboración de turrón amparado bajo la IGP Alicante y Jijona, ha sido abandonado hasta por la cadena de supermercados valenciana Mercadona, en acuerdo con su proveedor Sanchís Mira Grupo La Fama (también Antiu Xixona).
Lo mismo sucede con otras cadenas de distribución como Carrefour, Día, Eroski, Lidl, Aldi, Intermarché, El Árbol, Covirán, Caprabo… se mantiene El Corte Inglés, pero a saber si con todas sus marcas. Sin duda, un sello de calidad nos da garantías sobre un producto, pero algo de razón podemos quitar a esta frase citada en la noticia sobre los turrones de Jijona y Alicante: “elaborados de forma artesanal con recetas heredadas por muchas generaciones de maestros del dulce”. Precisamente las firmas turroneras más grandes no siempre elaboran su turrón de forma artesanal, ni todos los turrones que no gozan del sello de garantía IGP Jijona o Alicante, son inferiores que los que lo portan.
Recordamos nuestra visita del pasado año a la fábrica de turrones artesanos San Luis, ubicada en la población castellonense de Cabanes. Esta es una empresa fundada en 1978 que cuenta con dos generaciones de maestros turroneros y trabajan con las mejores materias primas, las mismas que utilizan los fabricantes de turrón de Jijona y turrón de Alicante, pero no tienen el sello de garantía.
Pudimos disfrutar viendo cómo elaboraban el turrón de forma totalmente artesanal, también pudimos saborear la calidad de la materia prima y el buen tratamiento que se le había proporcionado, y como os comentamos, es un turrón que se comercializa en establecimientos gourmet. No será un turrón que entre en la cesta de la compra de quienes tienen que reducir gastos en el hogar, pero es uno de los mejores turrones que hemos probado y no luce el estimado sello.
Pero en fin, aún hay más, al parecer, el Consejo Regulador de la IGP Jijona y Alicante va a presentar una queja frente a las patronales del sector de hipermercados y supermercados, ¿de qué servirá? Los proveedores de turrón a las cadenas de distribución son los mismos, aunque el producto final no se encuentre amparado bajo el sello de garantía. ¿Quién se va a quedar sin Navidad?
Todo esto nos puede llevar a una conclusión y de nuevo a la lectura del post El Valor de las marcas o de las palabras citadas por el presidente de Danone España, ‘las marcas blancas no son malas para los fabricantes’. La estrategia parece estar clara, el Consejo Regulador de la IGP Jijona y Alicante no puede favorecer la venta de turrones de marca blanca que ellos mismos elaboran (prefieren venderlos bajo su marca), un consumidor que se encuentre ante una tableta de turrón de Jijona de la marca Hacendado a 2’29 euros y una tableta de turrón de Jijona Antiu Xixona etiqueta negra a 3’25 euros, si busca que sea un producto con sello de garantía y al mejor precio, escogerá la primera opción.
Por mucho que se insista en que las marcas blancas son de inferior calidad que las primeras marcas, no siempre es verdad, todos conocemos pequeñas empresas que fabrican para grandes cadenas de hipermercados o supermercados que proveen el mismo producto con un etiquetado y otro, no pueden variar la producción porque resultaría más caro parar la maquinaria o crear una nueva línea de fabricación para elaborar un producto de inferior calidad.
Que los turrones de marca blanca no tengan el sello de garantía IGP Jijona o Alicante, ¿es entonces una forma de dar valor a la marca?
