Acabamos de conocer una noticia que seguramente no será del agrado de los productores valencianos de naranjas, y es normal. La Unión Europea pretende dar luz verde a las naranjas de Marruecos y eliminar cualquier restricción que pesara sobre este producto. Los argumentos que proporciona Mariann Fischer Boel, la comisaria de Agricultura de la UE son bastante curiosos, indica que la producción marroquí ya no es tan competitiva y que cada vez se produce menos, las naranjas marroquíes no son valoradas. La Comisaria refleja que la producción marroquí pasó de 820.000 toneladas producidas en el 2003 a 740.000 toneladas el año pasado.
Quizá, al eliminar las restricciones y dar luz verde a la comercialización de naranjas de Marruecos pueda provocar un efecto contrario y terminen siendo más competitivas, pero esta preocupación se alejaría frente a otras que creemos mucho más graves. No hace mucho destacábamos que los cítricos españoles podrían estar en peligro debido a la posibilidad de que se introduzcan determinadas enfermedades en nuestro país al ser el clima más favorable para nuevos microorganismos.
ASAJA (Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores) solicitaba al Gobierno Español y a la Comisión Europea que extremara las precauciones sobre la importación de cítricos debido a los riesgos de que se introdujera en nuestro país una enfermedad de los cítricos denominada Greening o Huanglongbing proveniente de climas tropicales, en este caso podría introducirse a través de la vertiente africana de la enfermedad y recordemos que Marruecos está en el continente africano.
Al parecer, la recomendación de ASAJA ha sido obviada y el riesgo de que se introduzca la enfermedad en nuestro país es ahora mayor. Retomando el tema, si acudimos a los centros comerciales podemos comprobar que en la mayoría de casos las naranjas que se comercializan son de otros países, parece que se le da prioridad a los productos importados y se permite que cultivos enteros se abandonen en nuestro país.
Nosotros, igual que muchos de vosotros, somos testigos de ello, la temporada pasada podíamos comprobar como las naranjas eran abandonadas en muchos campos ante la imposibilidad de comercializarlas a un precio justo, en cambio, se permite la entrada de naranjas de cualquier otro país.
No sólo naranjas, muchos son los productos que provienen de Marruecos o de otros países y se comercializan masivamente aquí, algo obvio teniendo en cuenta que los costes laborales de estos países son notablemente más reducidos y siempre serán mucho más baratos que los productos que se produzcan en España.
En fin, quizá ahora las naranjas marroquíes no sean un problema, pero ya veremos en un corto plazo de tiempo. Nosotros seguiremos comprando naranjas valencianas recién cogidas del árbol y no nos importará pagar un poco más, la calidad y el sabor compensan sobradamente.
Por cierto, ¿tendrá alguna conexión la eliminación de las restricciones sobre las naranjas de Marruecos con la eliminación de las normas de calidad en frutas y hortalizas por parte de la Unión Europea?
