Las Bodegas Terras Gauda (Pontevedra) han dado a conocer que este año se elaborará por primera vez un albariño con levadura patentada. Tras cuatro años de trabajos e investigaciones realizadas en colaboración con el CSIC (Consejo Superior de Investigaciones Científicas), se ha logrado desarrollar una levadura capaz de mantener la calidad de los vinos albariños indistintamente de la añada a la que correspondan, reduciendo además lo que afecta la calidad de la cosecha o las inclemencias climatológicas.
Este tipo de trabajos es algo que persiguen muchas bodegas, ya que es un modo ideal para mantener la calidad de los vinos. Las levaduras son los microorganismos unicelulares de máxima importancia en el paso del mosto al vino y son los responsables de trasformar el azúcar en alcohol y de que el vino adquiera determinados componentes aromáticos. En este caso, se podría decir que la levadura obtenida es el molde que permite obtener cada año el mismo vino, se trata de una levadura capaz de equilibrar las características sensoriales del albariño que se produzca.
Disfrutar de una levadura propia y aislada permite, entre otros factores, marcar las pautas de calidad y carácter de los albariños producidos, los aromas que desprenden estos albariños, frutal, cítrico, etc., se verán reforzados para regocijo de quienes son amantes de los buenos albariños.
Terras Gauda se ha convertido en la primera bodega gallega que ofrecerá un albariño elaborado levadura patentada (pero no es la única bodega con levadura patentada de España), el hecho de patentarla está claro, es para impedir que otras bodegas hagan uso de ella, de este modo se garantiza una producción de albariños única que será ofrecida por estas bodegas.
Los responsables de las Bodegas Terras Gauda confían en la efectividad de la nueva levadura patentada e indican que no venderán la patente a ninguna otra bodega, ya que sería proporcionarles una valiosa herramienta con la que poder sobresalir por la calidad de los vinos producidos, es algo obvio.
Ahora, una empresa asociada al CSIC será la responsable de elaborar a nivel industrial la levadura que será inoculada en unos 300.000 litros de mosto que se convertirá en un albariño de excelente calidad. Si todo sale según lo previsto, el próximo año será inoculada a toda la producción de albariño, es decir, al mosto resultante de 1,3 millones de kilos de uva. Hay que decir que ya hicieron una primera prueba el año pasado con 60.000 litros y parece que los resultados fueron muy satisfactorios.
Las investigaciones continúan y se han puesto en marcha otros proyectos e investigaciones para mejorar todavía más los albariños que puedan obtenerse. Todo ello es fruto del deseo de ofrecer la máxima calidad a los amantes de este vino y por supuesto, destacar sobre otros albariños producidos por la competencia.
Por cierto, aún no se ha bautizado a la nueva levadura y de momento es simplemente el número de una patente, posiblemente el próximo año conozcamos el nombre de la levadura que logra mostrar todo el esplendor de un albariño producido en Bodegas Terras Gauda.
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