Antes de tomarnos las ansiadas vacaciones debemos dar un repaso y llevar a cabo la puesta a punto de varias cosas. Estar varios días o semanas fuera de casa requiere que todo quede en orden, si viajamos en coche hay que hacer la revisión pertinente y entre otras cosas que no están relacionadas con la gastronomía, hay que recordar que no debemos anunciar a los cuatro vientos que nos vamos de vacaciones y dejamos la casa vacía, ya sabemos a lo que nos arriesgamos, así que, si queréis enseñar vuestros días de verano en el destino vacacional en vuestras redes sociales, podéis esperar al regreso a casa.
En cuanto a las cuestiones que nos conciernen en Gastronomía y Cía, vamos a empezar con unos tips para dejar la nevera y la despensa en condiciones con el objetivo de evitar el desperdicio de alimentos, de momento vemos 15 alimentos que podemos congelar para dejar la nevera limpia antes de las vacaciones, y os explicamos cómo hacerlo. Además, con los ejemplos que podéis ver en este post podréis ampliar los consejos a muchos otros. Y es que, si dejamos en la nevera productos alimenticios que son perecederos, como frutas, hortalizas… (carnes y pescados ya tenemos más claro que se pueden congelar porque lo hacemos más a menudo), nos los encontraremos estropeados a nuestro regreso de las vacaciones.
Y también vamos a ver algunos alimentos de los que se suelen conservar en la despensa y que será una buena idea congelarlos aunque no se consideren perecederos, la razón es que, especialmente en verano, son el objetivo de polillas de la harina, palomillas, gorgojos… y esto hay que evitarlo. Así que aunque principalmente hablamos de la harina o de las legumbres secas en los consejos de este post, también podemos contemplar otros productos a base de cereales, como la pasta, los copos de avena, el arroz, etc. De todas formas, si no va a pasar mucho tiempo hasta que se consuman, bastará con guardarlos en la nevera.
Aprovechamos para animaros a que nos comentéis o consultéis sobre cualquier alimento que queráis guardar para consumir pasadas unos días o unas semanas, porque no seréis los primeros (ni los últimos) que en los días previos a las vacaciones tenéis que vaciar la nevera y no se tiene capacidad para consumir toda la comida que hay. También nos encantará que compartáis vuestros consejos al respecto, pues una buena organización siempre nos ayuda a todos.