Agrasys es una spin off o empresa formada por un grupo de investigadores, en este caso del CSIC (Consejo Superior de Investigaciones Científicas), que ha logrado crear un nuevo cereal para elaborar pan obtenido mediante técnicas naturales de selección y cruzamiento entre el trigo duro y una variedad de cebada silvestre (Hordeum chilense) procedentes de Chile y Argentina. Se han necesitado 30 años de investigación para desarrollar el Tritordeum, cereal con unas características interesantes a nivel de producción o propiedades nutricionales y organolépticas.
Tritordeum se presenta como un cereal cuyo rendimiento es similar al de otras variedades de trigo pero con la peculiaridad de que es capaz de adaptarse mejor al cambio climático, soportar las sequías extremas, las altas temperaturas y otras características agronómicas capaces de hacer frente a los cambios medioambientales resultantes del calentamiento global. Como decíamos, se ha desarrollado utilizando técnicas de selección y cruzamiento, no se ha trabajado con ningún tipo de manipulación o modificación genética, por lo que se trata de un nuevo alimento que puede introducirse en el mercado comunitario sin que deba sufrir las restricciones habituales asociadas a los alimentos transgénicos.
El nuevo cereal para elaborar pan ha sido desarrollado por el profesor Antonio Martín y el equipo de investigación del IAS (Instituto de Agricultura Sostenible) perteneciente al CSIC, el trabajo ha sido largo y lento, el proyecto se puso en marcha en el año 1977, por lo que han pasado más de 30 años, pero parece ser que el resultado ha merecido la pena. La spin off posee los derechos comerciales y de explotación de Tritordeum desde el año 2006, siguen trabajando para obtener nuevas líneas a partir de las dos variedades obtenidas del cereal, la investigación se centra ahora en obtener variedades que satisfagan a la industria alimentaria.
La base de germoplasma para seleccionar las nuevas líneas del cereal tiene más de 250 líneas primarias obtenidas de cruzamientos entre el trigo y la cebada, contiene además una gran diversidad de carácteres de interés como componentes nutricionales y funcionales, esta colección de carácteres se han perdido en gran medida en los cereales convencionales que se cultivan, siendo mucho más homogéneos. Tritordeum tiene un sabor agradable, altos niveles de fibras y proteínas, 10 niveles más de luteína, un pigmento amarillo con propiedades antioxidantes que previenen el ataque de los radicales libres, contiene menos gluten que el trigo común, y es rico en minerales y compuestos de acción prebiótica, es decir, elementos no digeribles que benefician al organismo.
El Tritordeum está registrado en el CPVO (Community Plant Variety Office) de la Unión Europea, se trata de una agencia que gestiona el sistema de derechos de las variedades vegetales de los estados comunitarios. El proceso de registro de la primera línea del cereal denominada Aucan, se inició en el año 2008, aunque se registrarán otras líneas que están en los últimos estadios de desarrollo y evaluación. En la actualidad el cereal se está cultivando en Catalunya, Andalucía, Castilla y en otros países como Portugal e Italia, el cultivo se desarrolla mediante los sistemas convencionales y ecológicos, aunque con la particularidad de que ofrece una alternativa con valor añadido en ambos sistemas. Del Tritordeum ya hablamos hace unos años, desde entonces se han hecho muchos avances y algunas cadenas de pan gourmet ya han elaborado todo tipo de productos con el cereal, pan, galletas, bizcochos y otros productos de pastelería.
A través de la página oficial de Agrays podréis conocer todos los detalles sobre Tritordeum, el nuevo cereal para elaborar pan, también podremos conocer otras líneas de investigación interesantes.
2 comentarios
El Tritordeum no se ha desarrollado utilizando ingeniería genética, y por tanto no está regulado como un alimento transgénico, pero cruzar y seleccionar plantas durante 30 años (lo que se llama mejora genética tradicional) es en efecto manipulación genética, y por tanto no se trata de un cereal «natural», un término que a mi parecer se usa muy alegremente, con una fuerte intención comercial y con escaso rigor. Dicho sea de paso, con ingeniería genética se podría haber reducido considerablemente el tiempo que se ha tardado en obtener este cereal. Pero con tanto prejuicio anti-transgénico, a ver quién les compraba el pan. Qué triste.
Irene tienes toda la razón. Esto es un OMG pero modificado con una técnica de baja eficiencia. Han tardado 30 años porque no han querido usar una pipeta. Estará bueno, no lo niego, pero natural no es. No se porque tantos panaderos artesanos trabajan con el.